Desde tiempos de la Grecia antigua el debate como estrategia de enseñanza ha despertado interés en el mundo académico. En la literatura podemos encontrar resultados de implementaciones de debate en una amplia gama de disciplinas, como la geografía, la administración de empresas, la medicina, la farmacia o la enfermería.
En este contexto, los docentes e investigadores miembros del grupo Basque Nursing Education Research Group (Grupo BANER) adscrito al IIS Bioaraba se plantearon revisar cómo se había aplicado hasta la fecha el debate en la enseñanza de la enfermería y los resultados asociados a esta estrategia educativa.
En el trabajo publicado en la revista Nurse Education Today1, el equipo investigador trató de dar respuesta a este objetivo mediante una revisión sistemática de la literatura sobre la aplicación del debate estructurado como estrategia docente en la titulación de enfermería.
Si bien, a priori, parece lógico pensar que una herramienta de enseñanza que se basa en la argumentación y la refutación es válida para desarrollar competencias, los resultados de la investigación demostraron que se han publicado pocas implementaciones sobre debate estructurado en el ámbito de la enfermería. Además, el análisis de los estudios realizados reveló una gran variabilidad de formatos de debate y la falta de evaluación de su eficacia.
En este sentido, y de cara a un futuro no muy lejano, los miembros del grupo BANER, que tiene como línea de investigación principal promover proyectos dirigidos a mejorar el aprendizaje del alumnado de enfermería a través del desarrollo de metodologías activas, se plantea la necesidad fundamental de identificar el mejor formato y método de evaluación para debatir. En sus propias palabras, “En un momento en el que estamos experimentando un aumento de la popularidad y disponibilidad de las tecnologías de aprendizaje online, abogamos por reconsiderar la esencia de la enseñanza. En la revisión sistemática recientemente publicada, proporcionamos al profesorado un marco basado en la evidencia para diseñar e implementar secuencias de enseñanza más sólidas basadas en el debate. De esta manera, podremos guiar la investigación futura y desarrollar, aún más, la ciencia de la educación de enfermería y de las ciencias de la salud”.